Obras en Producción
Hola, bueno como bien el nombre lo dice, aquí tendremos las obras que serán publicadas durante el año, que están a más de las cien páginas y ya han sido editadas. De la misma manera, en "próximamente" aparecerán aquellas que van a ser publicadas junto a su fecha.
De la misma manera, pronto tendré una pestaña más para aquellas obras que serán vendidas, que están en edición en la editorial y cuando podrán adquirirlas.
*Los resúmenes, así como las imágenes de portada pueden cambiar, pero la idea principal se mantendrá.
Aquí lo tienen:
Resumen
Alexus es el cantante
joven más popular del momento. Con solo diecisiete años ha logrado tener el
amor, obsesión y anhelo de millones, sus preciosos fríos ojos grises y su
cabello negro lacio son la perdición de muchas y muchos. Pero como Anthony
Thomas, el frío y antipático chico de diecisiete años que nadie de su equipo
soporta, Tony lidia con alejarse de las personas con dobles intenciones y
termina alejando a todos con su horrible carácter.
Su manager se frustra al ver que no logra encontrar una sola asistente que
soporte el sarcasmo, la ironía y lo grosero de Tony. Pero gracias a la
hermanita de este, logra contactar con un chico que tiene la experiencia
laboral suficiente para lidiar con una estrella con súper ego. Tony simplemente
detesta a las mujeres que siempre se desviven por él, por lo que cuando Karen
le dice que ha encontrado un chico de su misma edad, lo suficiente maduro y de
fuerte carácter para lidiar con él, Tony quiere disfrutar del reto.
Bueno hasta que sus ojos se posan detenidamente en Kevin Rivers.
Kevin ha tenido una vida muy dura desde que su padre murió hace tres años,
pues ha tenido que lidiar con una madrastra que se aprovecha de él, así como
lidiar con trabajos duros siendo muy joven. Camarero medio tiempo, así como
asistente de productor, asistente de luces; bueno, Kevin tiene la suficiente
experiencia para tener varios trabajos y nadie duda de su dedicación aunque
solo tenga diecisiete años. Cuidar de una casa, sus servicios y de los estudios
de su hermano menor, quien además, necesita más cuidado al estar enfermo de
cáncer.
Kevin necesita un trabajo más formal para poder pagar los recibos médicos
antes de que los doctores lo interroguen sobre su madrastra, por lo que cuando
su hermanito le dice sobre una audición para asistente de una estrella, lo
menos que puede hacer es presentarse. No esperaba, sin embargo, que la audición
sería para asistente de Alexus, su
cantante favorito.
Resumen
Dean McGregor es un hombre con poca paciencia, frió y calculador. Sabe que
los juegos de su hermana para conseguirle una esposa, son realmente un
fastidio, más cuando él no está interesado en ni una de las mujeres que le
propone para conquistar y poseer. No cuando su interés no es para ellas.
Claro que todo tiene que ver con el hecho de que él no tiene ni un interés
en las damas, ni sus curvas o lo que tengan para ofrecerle. Cuando su hermana
le anuncia que va a llevar a su nueva pretendiente a su casa para las
vacaciones, él está todo menos emocionado sobre ello. Las cosas cambian cuando ve
que la “dama” viene con un apuesto chico de acompañante. Él ciertamente no es
inmune a los encantos de Joseph Randall.
Siendo el hijo menor de la familia dueña de una gran empresa de muebles,
que ya tiene a su heredero y que considera tener otro hijo varón es un estorbo,
él no espera tener atención de nadie. Ni siquiera de sus hermanos y padres. Por
un momento puede salir del encierro de sus padres al acompañar a su hermana a
visitar a una amiga. Joe no se esperaba que cuando decidió aceptar, su hermana
lo usase como chaperón porque ella pretendía meterse bajo los pantalones del
dueño de la hermosa casona de campo. Claro que tampoco esperaba que este le
siguiera a él, con la mirada esmeralda.
Las cosas entre ellos son intensas desde el inicio. Una mirada es más que
suficiente para que Dean se dé cuenta que el pequeño hombre de ojos gachos es
exactamente lo que ha estado buscando. Pero ¿podrá enfrentar la irá de la
familia de Joe y la de su familia propia? O ¿estos alejarán a Joe antes de que Dean
pueda reclamarle para siempre?
Resumen
Logan Grayson es gracioso,
dulce y bastante tímido, siempre contento de mantenerse en sus estudios y en mantenerse
libre de problemas. Sin embargo sus padres siempre están inconformes con su
falta de buscar pareja, principalmente para las fiestas y reuniones de sociedad
a las que ellos desean pertenecer, pero nunca creyó que llegarían tan lejos en
su afán de tener poder y contactos de alto rango. Con diecisiete años, tan
virgen como el día en que nació, Logan tiene problemas para coquetear o
simplemente lanzar un piropo, sin embargo, nunca creyó que sus padres lo
casarían a la fuerza sin su permiso.
Logan se ve envuelto en la
controversia de sus padres casándolo sin su permiso con un hombre mayor que él,
que cree que ha adquirido un marido para poder mostrar. Logan tiene los ojos
verdes demasiados grandes para su gusto, con su cabello de un simple color
marrón demasiado liso y demasiado corto, su cuerpo es bajo y sin ni una clase
de musculo, él es claramente no un esposo para ser lucido, mucho menos por un
hombre como Lord Deacon Krause. No sabe en que estaban pensando sus padres al
casarlo de esa manera, él no es encantador.
Deacon Krause se ve en la
penosa situación de aceptar un matrimonio por conveniencia, sus familiares
están empeñados en casarlo con una mujer detestable aun sabiendo sus
orientaciones, por lo que acepta casarse por papeles con el hijo de Alden
Grayson, un nuevo y pequeño socio en su empresa de importaciones, el hombre le
afirmo que su hijo estaba dispuesto a un matrimonio por conveniencia y
aceptando ser usado por Deacon como trofeo para calmar a sus familiares. Deacon
nunca imagino que terminaría atado con un niñato que no tenía idea de su
matrimonio. Sin embargo, Deacon no puede romper el matrimonio, al ser el último
heredero de la línea del Conde de Whitewood se supone que contraer matrimonio y
hacer hijos es su primer deber, al casarse con un hombre él deja claro que no
puede dar herencia.
No esperaba con que sus tíos
pusieran a Logan a prueba, ni que el joven de ojos de venado acechado tuviera
un carácter fuerte y supiera cómo defender a su “esposo”, tampoco esperaba ser
tentado por los dotes y sonrojos del pequeño, ni mucho menos consumar su
matrimonio en los jardines de su mansión.
Deacon sin duda no esperaba
enamorarse, sin embargo, sus familiares no están dispuestos a dejar al único
heredero con un chico que no puede dar hijos y que no creen apropiado para
estar al lado del Conde de Whitewood. ¿Podrá Logan demostrarse lo suficiente
esposo para el Conde? ¿Deacon se dará cuenta que el pequeño puede ser más que
un trofeo? ¿Podrán ambos encontrar el amor en las montañas de Whitewood?
Prologo
Nicholas Rhodes sabía que debía sacar a sus hijos de ese
lugar, en ese momento, sí los encontraban lo más seguro era que no volviese a
verlos. No podía permitir que le arrebatasen lo más precioso de su vida, por
más que hubiera entrado en esa vida siendo joven, apenas un niño, él amaba a
sus hijos y no iba a dejarlos ser como él.
Nunca se lo perdonaría.
Se movió lentamente por la casa, los pasos extraños
hacían eco en el piso de abajo de la casa de dos niveles. Había sido mandado a
asesinar y estaba seguro que quien estuviera abajo era tan experto como lo era
él con sus veinticuatro años. Paso lentamente por el corredor al lado de las
escaleras, evadiendo las tablas flojas del suelo, sabía que debía haber hecho
que Michael las arreglase pero el jodido hombre nunca escuchaba una sola
palabra de lo que decía. Si no, mírenlo ahora, tratando de llegar a las
habitaciones de sus hijos sin ser escuchado, solo porque su jodido esposo no
podía mantenerse quieto y no instar a las malas personas.
A pesar de que él le había dicho que lo dejase.
Ahora, no solo no sabía dónde estaba Michael, sino que
tenía quien sabe cuántos hombres tratando de matarle para conseguir a sus
chicos.
Era una situación jodida, claro, sí no fuera porque era
el mejor asesino de la agencia. Pero no podía arriesgar a sus chicos a esa
clase de cosas, ellos no estaban totalmente entrenados, aun. Y aunque lo
estuvieran, no quería que tuvieran que matar a nadie, no frente a él y mejor
aún, nunca. Aunque tenía que ser realista y pensar en que ese momento llegaría,
estaba seguro de que lo postergaría cuanto pudiera.
Camino directamente hacía la habitación del mayor de sus
cuatro chicos, lentamente abrió la puerta y la cerró tras de sí. Tenía máximo
cinco minutos antes de que subieran a buscarlos. Se acerco despacio a la cama,
con ternura apretándole el pecho al ver al chico mayor acurrucado de un lado
con sus manos debajo de la almohada. Al igual que su padre hacía mientras
dormía. La luz que pasaba a través de las cortinas le dejaba ver el cuerpo
largo bien curvado.
—Kevin… —Susurró, no se sorprendió cuando los ojos verdes
se abrieron lentamente y casi demasiado rápido fue enfocado.
El ceño fruncido y la mirada verde moviéndose rápidamente
por la habitación lo hicieron sentirse algo más calmado. Kevin tenía el
entrenamiento más avanzado, aunque todos tenían su propia especialidad, era
Kevin el que tenía el deber de guiarlos.
—¿Nick?
Respiró profundo. —Necesito que tomes a los chicos y los saques
de aquí, pronto. —Dijo rápidamente. Kevin se levanto de la cama y empezó a
buscar su ropa, mientras que Nick miraba intensamente la puerta. —Tengo una
casa de seguridad a tres kilómetros de aquí, una pequeña casa de pórtico
amarillo. —Respiró profundamente cuando los temidos pasos en las escaleras
empezaron a resonar en el silencio.
También debía haberle dicho a Michael sobre el rechinido
de las escaleras, claro, que en este momento el descuido de su marido parecía
ser su bendición.
Sacó su 45’[1] de su
bolsillo, la armo sin necesidad de verla, la experiencia de un profesional siempre
estaría a su lado y en contra de sus enemigos. Pero ellos tenían una ventaja y
él era consciente de ello, ellos sabían que arriesgaría la vida por sus niños.
Porque él lo iba a hacer, pero no quería que Kevin, Alex, Stephen y su adorado
Nathan, lo vieran.
No en esta vida y preferiblemente no en otra.
Kevin se acerco a su lado en pasos lentos, calculados
para no hacer ni siquiera un ruido.
A su lado, lo miró de reojo, su mirada fija en la puerta.
—Michael finalmente nos jodió, ¿verdad? —Las palabras fueron susurradas pero
aún así él podía oír el odio en el tono. Por mucho que él insistiese en que su
esposo no tenía nada que ver, estaba seguro que su hijo mayor no le creería y
bueno, tenía razón.
—Kevin, cariño…necesito que saques a los chicos de aquí.
—Volvió a repetir suavemente, no iba a entrar en esa discusión, no ahora mismo
por lo menos. —En la casa encontraras una caja de seguridad, la clave es la
fecha del primer cumpleaños que compartimos juntos. —Él no necesitaba decir
específicamente cada paso a seguir, Kevin era mayor que él y a pesar de que su
entrenamiento era menor, podía guiar a sus hermanos a salvo. Suspiró. El primer
hombre había subido finalmente al segundo nivel. —Ahí encontraras la ubicación
de la nueva casa, los papeles para que puedan mezclarse.
Se movió lentamente hacía la puerta, el seguro de su arma
fuera y lista para atacar. Una mano sobre su hombro lo hizo detenerse, miró
sobre su hombro, su estomago se sintió pesado ante esos ojos verdes que eran
tan idénticos a los del hombre que había amado desde que tenía catorce años.
Los ojos verdes brillaban con determinación testaruda, la
misma que su padre tenía siempre cuando iba a cometer alguna estupidez y
terminaba haciéndolo tener un dolor de cabeza tremendo. Sus hijos eran
idénticos a Michael en muchas cosas. —Esperaremos por ti.
Nick negó enfáticamente. —No. Yo los en contaré, solo
estén donde yo les he indicado. —Se paró a un lado de la puerta, lentamente
tomó la perilla.
Kevin se pegó detrás de él. —Papá…
Nick sonrío. Kevin podía decir que odiaba a Michael todo
lo que quisiera, pero él entre todos era quien más se parecía a su odioso
padre. —No, Kevin. Encárgate de los chicos, los veré allá.
Fue tomado del hombro, hizo una mueca, no podía segur
perdiendo el tiempo. Miró con la absurda sabiduría que los años como un asesino
le habían dado, la sabiduría de haber nacido en una agencia que lo entreno
desde bebé para ser quien era y para que estos ahora quisieran especialmente a
sus hijos. Los chicos eran puros Rhodes y aunque unos de ellos no llevaban su
sangre, todos ellos tenían la sangre de Michael y para la agencia la sangre del
mejor espía era la genética perfecta para hacer más asesinos.
Él no permitiría que sus niños se hicieran igual que él.
Kevin cerró los ojos, ambos eran conscientes de los pasos
acercándose a la habitación. —Te quiero, Nick…papá.
Nick sonrío. —Te quiero también, bebé. —Sus palabras
hicieron que el chico de veinticinco años sonriera, un chico que no sonreía
mucho y que siempre se mantenía en sus pensamientos.
Ellos eran la razón por la que Nick no había dudado en
casarse con Michael, aún cuando ambos habían sido embaucados para estar juntos
y habían usado de su “semilla” sin que él lo supiera. Había sido un niño,
apenas un bebé, pero había usado para formar a los dulces chicos que ahora
adoraba y que había buscado por tanto tiempo sin saberlo.
Kevin, Alex, Stephen y Nathan, eran suyos e iba a
protegerlos.
Dándole una última mirada a su hijo mayor, abrió la
puerta, justo cuando el invasor se paraba frente a ella. Fríos ojos azules le
vieron, ojos que se suponía debían hacerle temer, realmente solo le dieron
risa. Los pasos acelerados de Kevin por la puerta que conectaba su habitación
con la de Alex fue su bandera a cuadros para arrancar.
La lluvia de disparos empezó a destruir las paredes así
como sangre manchar los pisos donde sus chicos habían aprendido a caminar, reír
y llorar. Le dolía, pero él había sabido que ese momento llegaría, solo…solo
tenía que salir con vida de ello.
El segundo de sus disparos dio en el brazo del invasor,
más pasos corrían desde la escalera. No era una sorpresa que se necesitase más
de un hombre para derrotar a un asesino, aún así no iba a ser suficiente. Él
estaba preparado para morir o morir matando, ellos no iban a salir de ahí
caminando y él iba a encargarse de ello.
Resumen
La leyenda dice que el salvador de los reinos regresará, el único
hombre con la fuerza suficiente para unir a todos los países del lado este, él
sería la única esperanza para traer la paz y traer la vida nuevamente. No se
sabe cómo regresará, ni que apariencia se supone que tendrá, solo que sus ojos
amatista son un rasgo que el Rey siempre ha tenido alrededor de sus
reencarnaciones y en está ocasión, no será diferente. Los ojos amatistas
representan al gran Rey, su personalidad traerá la paz y su sonrisa la vida,
todos esperan por su aparición, la que se supone está cerca de aparecer.
Declan Elric es un
hombre que ha sido abatido por la guerra, lastimado hasta lo más profundo por
lo que al principio creyó que era su forma de colaborar con su gente, como
general de su propia guardia se supone que debe de no tener alma para acabar
con sus enemigos, pero no puede sentirse de esa manera, mucho menos acabar con
la vida de niños que no tienen culpa de vivir en ese terrible mundo. Abatido
prefiere seguir con las órdenes con tal de no perjudicar a su hermano menor, el
alcohol es lo único que hace que continúe con esa vida, puesto que es el único
general en la capital Esmeralda con
el don de volar las cosas con la concentración de su mirada azul oscura, no hay
forma de librarse de sus demonios, hasta que encuentra en su camino a un
pequeño chico de ojos curiosos llamado Ariel.
Ariel es un chico
de dieciséis años con alma de viejo, bueno, eso es lo que aparenta ser para
Declan. El joven actúa como si fuera mayor, habla de manera suave pero severa
aunque siempre tiene una sonrisa para quien desee hablar con él. Declan no
entiende al niño desbaratado que con un movimiento de su mano puede destruir
casas y edificios, que con un chasquido de sus dedos puede iniciar una fogata,
que cuando aprieta los puños y derrama lágrimas puede hacer temblar la tierra y
hacer que caiga un diluvio. No entiende la razón por la que un niño de
dieciséis años anda de viajero, ni mucho menos porque lo hace en un reino lleno
de irá y odio, cuando Ariel es el epítome de la amabilidad.
Declan nunca creyó
en las leyendas ni cantos de las ancianas llamando al alma de un supuesto gran
Rey, pues nunca vio la ayuda de alguien para detener esa terrible guerra. Pero
cuando la guerra realmente está cerca de quitarle la vida al tratar de salvar a
su hermano pequeño es cuando realmente se da cuenta que Ariel es más de lo que
aparenta.
siii, lucen excelentes Cele, yumi yumi, besos
ResponderEliminar
ResponderEliminarHola Celeste, las reseñas prometen una buena historia, habrá que esperar para poder leerlas :)
Ohhh!!! Celeste! Te has lucido! ;) se leen fantasticamente estas historias, me has dejado con unas buenas ganas de leerlas. Y las portadas son geniales. Saludos.
ResponderEliminarWooooooooooow mi Cele tu como siempre con esa prodigiosa imaginación!!! realmente las reseñas están taaan provocativas q no puedo esperar para leer cada una de esas historias....gracias querida por hacernos tan felices, besos y mas besos :* :* :*
ResponderEliminarOMG!!
ResponderEliminarEspero ansiosa los primeros caps de cada uno de estos libros, prometen >///<.
Gracias por las sinopsis y fighting!!
:D
Hola Celeste, si que sabes como mantenernos con la boca abierta, estas historias se ven fabulosas , no puedo esperar a disfrutar de ellas.
ResponderEliminarbesos
hola! jajaja esto se vera un poco raro, pero te he buscado por todo internet, soy fan de dos de tu noverlas sobre joick, realmente me gustaria saber si las seguiras, por que me quede super intrigada sobre todo con Engaños! es mi favorita , espero que las sigas algun dia, me encanta como escribes y sobre todo la trama de la historia, saludos :)
ResponderEliminarGuao!!! me encantaron todas y cada una de ellas debo decir que especialmete las ultimas dos, espero con muchas ganas el día que empieces a publicarlas.
ResponderEliminarGracias por todas estas hermosas historias!!
Hola, yo no vi antes está pestaña. Que buenísima pinta que tienen.
ResponderEliminarLas reseñas muy interesantes. Besos
Celeste todas se ven buenisimas sin embargo quiero leer Encontrando a Sthepen
ResponderEliminarOMG!!...
ResponderEliminarMe separe por un tiempo un poco largo, pero la verdad es que no puedo evitar regresar, me encanta como escribes.
Espero con ancias estas historias---- Fighting!!!
Esperare el tiempo que haga falta >///<
Hola ! son imprecionantes todos !!! Y las sinopsis son todas tan hermosas que babeo de tan solo pensar que podre leerlas en algun momento , estaremos esperando todo el tiempo que necesites , besos.
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